La breve temporada que Mary Shelley pasó en 1816 frente al lago de Ginebra en compañía de su esposo Percy Shelley, lord Byron y algunos otros huéspedes menos notables, que daría origen a la escritura de Frankenstein, tiene su remedo criollo en la semana de invierno que Bioy y Borges pasaron hacia 1935 ó 36 en Rincón Viejo, la estancia ubicada en la localidad de Pardo, partido de Las Flores, que los Bioy se fueron heredando desde su construcción, a mediados del siglo XIX. Fue en ese momento, en una casa, medio en ruinas, cuando ambos amigos maquinaron tres textos de repercusión incalculable.
Atención NO ES UNA RESERVA!
Es solo a los efectos de disponer de los datos del ejemplar para solicitarlo a biblioteca.
Tenga presente también que puede seleccionar favoritos
(los documentos que le interesen) durante su
sesión y obtener una lista de ellos.
Formulario para Solicitud de Material
Jarkowski, Aníbal
Un invierno memorable
En: Revista Ñ. -- Vol. 570 (agos., 2014). -- Buenos Aires : Clarín, 2014
La breve temporada que Mary Shelley pasó en 1816 frente al lago de Ginebra en compañía de su esposo Percy Shelley, lord Byron y algunos otros huéspedes menos notables, que daría origen a la escritura de Frankenstein, tiene su remedo criollo en la semana de invierno que Bioy y Borges pasaron hacia 1935 ó 36 en Rincón Viejo, la estancia ubicada en la localidad de Pardo, partido de Las Flores, que los Bioy se fueron heredando desde su construcción, a mediados del siglo XIX. Fue en ese momento, en una casa, medio en ruinas, cuando ambos amigos maquinaron tres textos de repercusión incalculable.