Cada mañana los nobles de Tenochtitlán, tras lavarse y desayunar, se dirigían al trabajo en el centro de la ciudad. Según el testimonio recogido por el cronista Sahagún, cada amanecer los sacerdotes del templo hacían sahumerios, decapitaban una codorniz y quemaban copal (resina de los árboles). Una vez decapitada la codorniz, los sacerdotes la ofrecían al Sol.
ISBN: 1696-7755D
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Bueno, Isabel
Una jornada en la vida de un noble azteca
En: Historia National Geographic. -- Vol. 136 (mayo, 2015). -- Barcelona : RBA Revistas, 2015
Cada mañana los nobles de Tenochtitlán, tras lavarse y desayunar, se dirigían al trabajo en el centro de la ciudad. Según el testimonio recogido por el cronista Sahagún, cada amanecer los sacerdotes del templo hacían sahumerios, decapitaban una codorniz y quemaban copal (resina de los árboles). Una vez decapitada la codorniz, los sacerdotes la ofrecían al Sol.
ISBN: 1696-7755D